"La teología apofántica, tanto como la metafísica negativa, se sostienen en un cierto defecto de la predicación analógica, defecto fundado en la distinción ente-Ser a partir de la noción de creación ex nihilo. En este sentido la reflexión filosófica, como la teológica, sólo tienen acceso al Ser a partir de la dimensión del ente, y sólo desde él, la elevación predicativa al Ser se torna posible.
En cambio, en la dimensión estética, más aún, en la Belleza misma, la negación no tiene lugar predicativo ni espacio metafísico. En la Belleza la analogía es accidental pues en ella la univocidad es manifestación de la "integritas pulchritudinis"; en este sentido la analogía desaparece pues, en el seno de la Belleza, no tiene lugar la distinción , como tampoco es posible distinguir, en el seno de la luz, la luz misma de su sí mismo. Dicho de otra forma en la Belleza hay sólo afirmación por vía de eminencia, y tal eminencia no es sino la simplicidad de su Luz".
"The Angry Sea"
Óleo sobre lienzo
Thomas Moran - circa 1906
(Bolton, 12 de febrero de 1837 - Santa Bárbara (California), 25 de agosto de 1926)